La actividad se desarrolla en un campo de tiro especialmente acondicionado, rodeado de un entorno natural que invita a desconectar del ritmo urbano. Con dianas situadas a diferentes distancias, se adapta a todos los niveles, desde principiantes hasta quienes ya dominan la técnica. La disposición del espacio permite realizar juegos y retos en grupo que fomentan la interacción y el espíritu competitivo.

La seguridad es una prioridad, por eso se incluyen protecciones individuales como brazales y protectores de dedos, además de instrucciones claras por parte de monitores especializados. El personal guía la sesión desde el inicio, explicando el uso correcto del equipo y supervisando cada lanzamiento para garantizar una actividad segura y controlada.

El tiro con arco no solo implica puntería, sino también concentración, control y una dosis de estrategia. Durante la sesión, los participantes pueden mejorar su técnica mientras compiten en pruebas por equipos, acumulando puntos y celebrando cada acierto. La actividad se adapta al ritmo del grupo, con dinámicas personalizadas que garantizan entretenimiento para todos.

Perfecta para cualquier edad a partir de los 10 años, esta experiencia se convierte en un plan diferente y memorable. Ya sea como parte de una despedida, un plan de team building o una escapada de fin de semana, el tiro con arco ofrece una alternativa original, dinámica y apta para todos.