Cada participante recibe un chubasquero y cubre zapatos, porque aquí el objetivo es salpicar, crear y dejarse llevar. No hay reglas ni técnicas, solo el placer de expresarte libremente con color, movimiento y una copa en la mano.

Ideal para grupos que buscan algo diferente, esta experiencia os permitirá liberar energía, reíros a carcajadas y llevaros un recuerdo artístico único de vuestra despedida.

En esta actividad, cada persona cuenta con su propio lienzo y todas las pinturas necesarias para dar rienda suelta a la imaginación. Con el ambiente neón y la música de fondo, el espacio se convierte en un auténtico festival de color y ritmo.

Las luces crean un efecto visual increíble: los colores brillan, las salpicaduras destacan y cada trazo cobra vida. Es imposible no disfrutar mientras pintas, bailas y compartes el momento con tus amigos o amigas.

Además, el monitor o monitora os guiará para aprovechar al máximo la experiencia, ayudando a que el resultado final sea un recuerdo espectacular de la despedida. ¡Una combinación perfecta entre arte, diversión y risas!

Para completar la experiencia, cada participante tiene una copa, porque en esta actividad no solo se pinta: también se celebra. El ambiente festivo, la música y las luces crean una atmósfera ideal para disfrutar del momento y brindar por el futuro del novio o la novia. Una actividad que combina arte, creatividad y diversión con ese toque de celebración que toda despedida necesita.