¿Qué es el rafting y por qué todas las despedidas lo contratan?

¿Cansados de las típicas despedidas con las mismas cenas, los mismos disfraces y las mismas copas?

Si tú y tu grupo estáis organizando una despedida y sentís que todo os suena a más de lo mismo, este artículo os interesa.

Porque hay vida más allá de las camisetas con frases vergonzosas. Hay despedidas que se recuerdan. Que hacen historia. Que son épicas de verdad.

¿Y si en vez de repetir el mismo plan de siempre, sorprendéis al novio con un plan de esos que te hacen gritar, reír, mojarte y sentirte más vivo que nunca? Bienvenidos al mundo del rafting, la actividad que todas las despedidas modernas están contratando.

¿Qué es el rafting?

El rafting es, técnicamente, el descenso por ríos de aguas bravas en una balsa inflable, guiada por un monitor profesional y con todo el equipamiento necesario (neopreno, chaleco, casco, remo…).

Pero, en realidad, el rafting es una montaña rusa en el agua. Es un cóctel de adrenalina, compañerismo, carcajadas y gritos que os une como grupo y os da la sensación de estar viviendo algo de película. No hace falta ser deportista ni tener experiencia previa. Solo hay que tener una cosa: ganas de pasarlo brutal.

¿Por qué es ideal para despedidas de soltero?

Organizar una despedida es buscar ese punto justo entre diversión, emoción y planes diferentes. Y aquí es donde el rafting lo tiene TODO:

• Es una experiencia compartida que une al grupo. Olvídate de los planes donde el grupo se divide entre los que se apuntan a todo y los que prefieren mirar. En el rafting, todos reman en la misma dirección (literalmente). Tenéis que coordinaros, seguir instrucciones y vivir juntos la emoción de superar el río. Y eso, quieras o no, crea un vínculo brutal. No hay mejor forma de romper el hielo o reforzar la conexión entre amigos que reírse juntos mientras la balsa da un bote inesperado. Incluso esos grupos donde hay mezcla de amigos del trabajo, primos, cuñados o amigos del cole… aquí todos se integran.
• Porque tiene el punto justo de aventura. Una despedida tiene que ser emocionante, pero no hace falta escalar el Everest ni lanzarse en paracaídas. El rafting tiene ese equilibrio perfecto: es emocionante, divertido y muy seguro. La actividad se adapta al nivel del grupo. Si sois cañeros, hay ríos con tramos más intensos. Si queréis algo más tranquilo (pero sin perder la gracia), también hay rutas suaves. Siempre vais acompañados de monitores expertos que lo hacen todo más fácil.
• Porque deja fotos y recuerdos inolvidables. Vale, el momento mojados con casco puede no parecer muy “instagrameable”… pero todo lo contrario. Las fotos del rafting son las que más se comparten después.
• Porque desconectáis del mundo real. Después de semanas organizando, buscando fechas, reservas, ajustando presupuestos y soportando los mil “yo no puedo ese finde”… os merecéis un momento así: aire libre, agua, risas, sol y naturaleza. El rafting es también respirar profundo, olvidarse del móvil, del curro y disfrutar de estar juntos y celebrando algo bonito.

¿Y después del rafting, qué?

El rafting deja al grupo con una energía altísima. Así que el plan ideal es seguir la fiesta:

• Comida al aire libre: muchas empresas ofrecen menús después del rafting.
• Juegos de grupo o gymkanas, para seguir con el cachondeo.
• Descanso en alojamiento rural si queréis hacerlo en formato finde.
• Salir de fiesta por la zona si os apetece un cierre más cañero.

Y lo mejor: todo puede venir en pack. Vosotros solo decidís cuántas ganas tenéis y nosotros lo organizamos todo.

Rafting = emoción, risa y recuerdos de los buenos con Paradise Despedidas

Si estabais buscando un plan de despedida de soltero que no fuera “lo típico”, que sorprenda al novio, que os saque de la rutina y os haga sentir vivos, el rafting es vuestra respuesta.

En Paradise Despedidas, organizamos despedidas con rafting por toda España: actividades, comida, fiesta, alojamiento, transporte… ¡todo cerrado para que solo os preocupéis de pasarlo increíble!

👉 Escríbenos y te preparamos un plan a medida. ¡El novio no se lo espera… pero lo va a flipar!