La ambientación transporta a los jugadores a un mundo lleno de mecanismos inusuales, objetos misteriosos y escenarios sorprendentes. Para hacer la experiencia aún más realista, el juego cuenta con una sala ambientada. Cada detalle está pensado para sumergir a los asistentes en una auténtica investigación al más puro estilo Sherlock Holmes.

El profesor Moriarty, con su astucia sin igual, ha creado una serie de pistas y acertijos para impedir que el grupo logre escapar. Solo quienes demuestren agilidad mental, capacidad de observación y lógica podrán superar cada obstáculo y resolver el enigma antes de que se agote el tiempo. Cada prueba requiere atención al detalle y una buena dosis de ingenio.

Para garantizar que cada equipo aproveche al máximo la experiencia, un Game Master supervisa el desarrollo del juego.

El Escape Room Sherlock en Tenerife pone a prueba la capacidad de trabajo en equipo. La cooperación entre los participantes resulta clave para analizar las pistas, resolver los acertijos y desentrañar los secretos de la sala. Solo aquellos que sepan coordinarse y comunicarse eficazmente lograrán superar la prueba impuesta por Moriarty.