No se trata solo de conocer los pasos básicos, sino de sentir la vibra del flamenco mientras te dejas llevar por la música y el ritmo. La energía de grupo será primordial para que la sesión se convierta en un recuerdo inolvidable, donde las risas, los aplausos y las ganas de bailar harán que cada momento valga oro.

Además, la clase se dará en un los lugares más emblemáticos y tradicionales de Sevilla, impregnado de historia y cultura, rodeado de pura esencia del arte andaluz. Este entorno no solo hará que la experiencia sea más auténtica, sino que os hará sentir que formáis parte de la tradición flamenco en el lugar donde nació.

Con el objetivo de disfrutar de la experiencia flamenca, tenéis la opción de añadir un snack especial que os ayudará a recuperar fuerzas entre cada baile. Tras una intensa práctica de flamenco, no hay nada mejor que hacer una pausa para brindar y compartir opiniones.

Alternativa perfecta para convertir una clase en una actividad completa, combinando el arte del baile flamenco con el goce de probar sabores tradicionales.